Un reciente estudio de EY muestra que más de la mitad de las organizaciones continúa usando este programa para llevar registro de su información ESG. Avanzar hacia alternativas más adecuadas es clave para transformar este proceso y, de paso, impulsar la gestión en sostenibilidad de las compañías.
Así como el mundo de la sostenibilidad evoluciona de forma constante, los métodos y herramientas que se utilizan para afrontar estos asuntos deben ser cada vez más dinámicos, de modo que las empresas puedan adaptarse y responder a las necesidades que vayan surgiendo.
Consciente de esta premisa, la firma especializada Ernst & Young -EY- realizó una investigación sobre el estado de la gestión y el reporte de información ESG en las organizaciones, tomando como muestra las compañías que cotizan en bolsa con sede en Estados Unidos.
En total, 72 directores de contabilidad de estas empresas respondieron al ejercicio, el cual refleja los avances de las organizaciones en cuanto al cumplimiento legal, el reporte de sostenibilidad, la participación de la alta dirección en estos temas y, en general, los desafíos para una mejor gestión de información ESG.
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Los hallazgos del estudio evidencian la importancia de transformar este proceso. El 60% de los encuestados asegura que la información ESG en sus compañías es como una “colcha de retazos” de distintos software y que, para el 55% de ellas, tenerla actualizada es una odisea que aún depende de Microsoft Excel.
Si bien este software se ha convertido en un aliado corporativo para la gestión y visualización de datos, en cuestión de soportar el manejo de información ESG de las organizaciones ha empezado a quedarse corto, no solo por la capacidad operativa -múltiples usuarios con distintas necesidades y roles en el proceso-, sino por los límites sobre lo que se puede hacer después con la data.
No es casual que, según EY, solo el 8% de las empresas indicaran tener “un set de procedimientos relativamente completo para aprovechar e implementar de forma consistente su información ESG". Esto, en términos prácticos, significa que las organizaciones que reportan indicadores de sostenibilidad están haciendo su respectiva divulgación, pero se están perdiendo del resto de los beneficios.
Teniendo en cuenta que en la gestión de información ESG también se presentan errores y reprocesos, el estudio sugiere que los informes de sostenibilidad están quedando en deuda en términos de rigurosidad. ¿Qué pueden hacer entonces las compañías para cambiar este panorama? Simple: optar por una solución como MERO.
Nuestro sistema de información de sostenibilidad responde a los problemas de operatividad e implementación que destaca el estudio. Con él, las organizaciones pueden gestionar toda su información ESG en un solo lugar e integrar múltiples estándares de reporte, facilitando así el trabajo de quienes se encargan de estos datos.
Además, como la información es confiable, está disponible en cualquier momento y puede visualizarse en tableros dinámicos, MERO permite que los directivos de las empresas accedan a ella y la usen como insumo para la estrategia del negocio, haciendo también más simple la toma de decisiones.
Según la investigación de EY, más del 60% de los directores de analítica, financieros y de auditoría están "moderada o altamente involucrados con los procesos de reporte ESG", compromiso que debe aprovecharse y servir como incentivo para llevar la gestión de esta información al siguiente nivel.
Con todas las condiciones sobre la mesa, las organizaciones no tienen excusa para seguir gestionando su información ESG en fichas de Excel. Buscar una opción óptima para este proceso es una decisión alineada con las tendencias de reporte actual, que responde al interés creciente de la alta gerencia y que, en definitiva, genera mejores resultados en las compañías.